jueves, 26 de septiembre de 2013

2) No tomar su santo nombre en vano

(*OMG!)  El segundo mandamiento revelado por Yahvé nos refiere al uso semántico del nombre de dios, particularmente la prohibición  de blasfemar. Aunque, sin ser excluyentes uno de otro, también se relaciona con el hecho de testificar y/o jurar en nombre de dios, ya que en caso de un falso juramento, dios sería testigo de una mentira. Teniendo en cuenta que el enfoque de este análisis es acercarse a la mitología cristiana como un observador externo, alguien que desconociera absolutamente el tema,  cabría destacar que a simple vista no parece haber mucha diferencia con el 5º mandamiento, el de “no mentir”. Consulte ud. distintas fuentes cristianas y notará que no existe un claro consenso, y que las explicaciones son bastante vagas al respecto. Por mi parte creo que una cosa es maldecir, otra es jurar, y otra es el falso juramento. No son excluyentes entre sí , ni pueden ser interpretados como la misma acción.



Quizás el motivo de esta confusión sea a raíz del discurso de Jesús en Mateo 5 33/36: “Habéis oído también que se dijo a los antepasados:   No perjurarás, sino que cumplirás al Señor tus juramentos. Pues yo digo que no juréis en modo alguno: ni por el  Cielo, porque es el trono de Dios, ni por  la Tierra,  porque es  el escabel de sus pies;  ni por Jerusalén,  porque es  la ciudad del gran rey. Ni tampoco jures por tu cabeza, porque ni a uno solo de tus cabellos puedes hacerlo blanco o negro”(...).

El evangelio de Mateo corresponde lo que denominamos el nuevo testamento. En este pasaje se aprecia una reinterpretación que Jesús hace del al antiguo testamento, uno de los pilares que diferencia, por ejemplo, judíos de católicos (Aunque Yahvé sea  padre de Jesús, o él mismo encarnado, o como sea que ud interprete el disparate de la trinidad). Jesús corrige a Yahvé, y extiende el mandamiento de “no jurar en falso” (no muy diferente a mentir) a “no jurar” en absoluto.  De aquí que la interpretación que cada credo realice sobre este mandamiento en particular dependerá de que tanto influye uno u otro testamento.

Ahora bien, como observadores externos, nos queda preguntarnos ¿puede al segundo mandamiento constituirse como un fundamento moral? Entendamos aquí que partimos del supuesto de que sin los mandamientos revelados por Yahvé  la sociedad no podría haber sobrevivido hasta nuestros días. Al menos, esa es la afirmación que sostienen sus defensores.  La humanidad no tendría las herramientas para discernir entre la bondad y la maldad, y no habría consecuencia ética alguna ante un caso de robo, violación, etc.
Para evitar la ponderación de un credo sobre otro, tendré en cuenta las tres variables interpretativas, a saber: la blasfemia, el juramento en falso y el juramento auténtico.

Sobre la blasfemia, creo que el punto el claro: la única consecuencia moral del asunto gira en torno a como ud interprete a dios. Para los no creyentes, nos da exactamente igual invocar a Yahvé, a Thor o a Baal. No veo cual pudiera ser el rol ético de la blasfemia. Entiendo que invocar a una deidad ajena o bromear con ella podría considerarse un insulto a las creencias de otro ser humano, pero es el dogma el encargado de marcar esa diferencia. Creo que en ese caso, el correcto mandamiento podría ser " no prestéis atención a lo que diga tu prójimo" (o mejor: "los de afuera sois de palo"). Ahora, si usted considera que cualquier infiel que no adore a su dios merece la muerte, el problema no es la blasfemia. Nombrar a una deidad inexistente no altera la sociedad: Ejemplo: yo gritaré ¡Maldito sea  hntlublñlññllmngibjjojobo !!! (mi dios personal del alfajor) y...............No, no produjo nada. 
Pero poner una poner una bomba en una escuela porque alguien se ríe de mi dios personal del alfajor, bueno, eso depende de mi grado de locura, no del dios hntlublñlññllmngibjjojobo. Sea una reacción moderada, colérica o piadosa, siempre será la religión organizada y sus valores la vara con la que medirla.  Con respecto a no blasfemar por temor a enfurecer a dios, bueno, no veo como podría afectar el buen funcionamiento de la sociedad. A lo sumo tendrá ud que pagarlo en otra vida, o purgatorio, o infierno, o a donde sea que ud crea que va a ir después de muerto. En esta vida, terrenal, no tiene significación.  

El nivel de atraso cultural de las tribus en las que se basa en antiguo testamento podría señalar la falta de referencia a la blasfemia gráfica. No es necesario utilizar el nombre de Yahvé para blasfemar, con dibujarlo es suficiente. Toda la cultura israelí de ese período muestra una casi nula producción artística, en comparación con, por ejemplo, los egipcios (Se estima que para la época en la que se centra el relato ficticio del éxodo, las pirámides ya tenias algunos cientos de años). Por lo tanto, el arte (o más bien la falta de este) no presentaría una amenaza a los principios de la revelación. 
Con respecto al juramento en falso, me reservo el análisis a la entrada referida al mandamiento que dicta "no mentir", pues no veo la diferencia entre una acción y otra.
¿Y el hecho de jurar? El discurso de Jesús deja claro que esta práctica no es recomendable. ¿Sería provechoso para la sociedad desarrollar algún método por el cual uno no pudiera romper un juramento, aunque quisiera? No lo creo. Y queda muy claro que dios no es garantía de incorruptibilidad.
"La civilización occidental y cristiana"- León Ferrari- 1965



El problema aquí es la utilidad de tal práctica. Incluso en nuestros días, en muchos tribunales se jura testimonio con una mano en la Biblia (habría que preguntar cual de las más de treinta versiones existentes). Los funcionarios públicos encomiendan a dios la responsabilidad de velar por  la transparencia de su gestión, las fuerzas armadas defienden a dios y a la patria, los matrimonios suelen  hacerse ante los ojos de dios, (aunque ud no visite una iglesia más que para las bodas).  La figura de dios como garante de los juramentos ya podría considerarse obsoleta: los funcionarios siguen robándole al pueblo, los asesinos se declaran inocentes, las fuerzas armadas han cometido horripilantes crímenes contra la patria que dicen defender, la gente se sigue divorciando, y este mandamiento no es más que otro becerro de lata.   



*(OMG! siglas de "Oh My God"! 
Fuentes:
http://www.corazones.org
La santa Biblia (Standard revision). Version digital
Acerca de la Biblia ( Robert G. Ingersoll ) version digital
http://www.Catholic.net

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